Ya que llegaste hasta Baracoa, ¿por qué no aventurarte hasta la punta de la isla, donde Cuba comienza, por donde sale el sol? Punta de Maisí es el confín del país, frente al Paso de los Vientos y muy cerca se halla el maravilloso Pozo Azul.

Solo una ínfima proporción de los viajeros exploran la región más allá del Cañón de Yumurí. Pocos saben que, desde ahí, solo unos 30 km les separan del Faro que marca el extremo oriental de la isla y de una excursión poco accesible pero muy gratificante: el sendero que lleva a Pozo Azul.

Más allá de Yumurí, donde casi nadie va

Una nueva carretera une el Cañón de Yumurí con el pueblo de Sabana. En ella ha sido habilitado un mirador que permite ver toda la costa norte de Baracoa, con las montañas El Yunque y la Bella Durmiente en la distancia.

Al atravesar el puente sobre el río Yumurí, uno pasa de Baracoa al municipio de Maisí. El paisaje geográfico y humano cambia, pues Maisí está constituido sobre todo por terrazas de roca calcárea cubiertas de una vegetación de arbustos y cactáceas. La población mayoritariamente rural cultiva sobre todo lo que en Cuba llamamos viandas: tubérculos como la malanga (Colocasia esculenta), la yuca (Manihot esculenta), el boniato (Ipomœa batata) y el ñame (Dioscorea rotundata y cayenensis).

El Faro en la Punta de Maisí

Cuando hayas pasado el pueblo de La Máquina, cabecera municipal de Maisí, comenzarás a descender de una terraza geológica calcárea a la siguiente y pronto podrás ver la línea de la costa donde se termina (¡o donde comienza!) Cuba.

En la Punta de Maisí, un faro fue terminado de construir el 19 de noviembre de 1862 para orientar a los navegantes. El Faro de Maisí es muy simbólico en Cuba pues, cuando se llega a él, uno habrá cubierto el territorio cubano hasta uno de sus extremos.

Con una altura de 37 metros, el Faro es visible por la noche a una distancia de 27 millas náuticas.

Frente al Faro de Maisí se encuentra el Paso de los Vientos. Del otro lado de este estrecho marino, y a unos 80 km de distancia, se encuentra Haití. Los trabajadores del Faro cuentan que, en días de cielo despejado, es posible ver las montañas haitianas desde ahí.

El sendero hacia Pozo Azul

Poco antes de llegar al Faro de Maisí, una calle rumbo al norte conduce a donde comienza el Sendero Pozo Azul, de 12 km de longitud. Manejado por la Empresa Agroforestal Maisí, el sendero comprende un camino poco transitable en vehículos automotores. Su superficie es rocosa, irregular y solamente ciertos vehículos de tipo “4 x 4” o “todo terreno” logran adentrarse en él.

El sendero avanza sobre la primera terraza geológica calcárea, siguiendo de cerca el farallón que separa a ésta de la segunda terraza.

A lo largo del camino verás este farallón a mano izquierda, con sus caprichosas formas rocosas, incluyendo cuevas, estalactitas y estalagmitas.

Vale la pena hacer al menos una parte de este sendero a pie. La zona se presta mucho para la observación de una variedad de mariposas.

La vegetación local es muy interesante, y también podrás observar polimitas (Polymita picta, Polymita brocheri brocheri y Polymita brocheri cuestana, coloridos caracoles endémicos de la región) y aves tales como la cartacuba (Todus multicolor), las cotorras y las garzas, entre otras.

A medio camino, el mirador

En el kilómetro 6 del Sendero Pozo Azul ha sido habilitado un mirador con una hermosa vista panorámica. Para llegar a él, la Empresa Agroforestal Maisí ha instalado un sistema de escaleras de madera que te permiten escalar el farallón y llegar a la segunda terraza geológica.

Al subir por estas escaleras, atravesarás cuevas hasta llegar al mirador, construido también con madera.

Desde el mirador podrás disfrutar de amplias vistas de la primera terraza geológica, cubierta de una verde vegetación muy densa. Y a lo lejos, el mar…

Aunque las escaleras que te permiten subir al mirador no son agotadoras ni nada por el estilo, al llegar arriba y mirar hacia abajo notarás que habrás ascendido varias decenas de metros.

Al final, un oasis en medio de las rocas

Pozo Azul es una dolina o depresión natural en roca caliza, causada por la acción del agua de un río subterráneo que atraviesa un sistema de cavernas. Las aguas son ligeramente salobres, pues el río se conecta con el mar.

Al aproximarte entre las rocas y la vegetación te cautivará la vista una superficie de agua en tonos que varían entre el azul turquesa y el verde esmeralda.

Un sistema de pasarelas y barandas de madera te conduce a las dos áreas de Pozo Azul. Una de ellas está rodeada por helechos y es de menos profundidad. Ahí, predominan los tonos de verde esmeralda, que contrastan con los tonos beige de las rocas en el fondo del pozo.

La otra área es mucho más profunda, y está rodeada sobre todo por un alto farallón de roca caliza blanca que separa a la primera de la segunda terraza geológica.

Acá podrás ver plantas como los agaves, además de los helechos. El tono predominante es el azul turquesa profundo.

En ambas zonas de Pozo Azul puedes bañarte en las aguas frescas. Notarás que hay peces, así como camarones y cangrejos entre las rocas en el fondo. ¡Y lo más probable es que no haya en este sitio nadie más que tú y tus compañeros de aventura!

Información práctica y detalles para tu presupuesto

• La excursión a Pozo Azul puede ser organizada por Ecotur en Baracoa y, para dos personas, tiene un precio de 64 CUC por persona con el transporte, servicio de guía, refrigerio, y entrada al sendero. (Nota: este precio puede variar en el futuro, pues se está rediseñando la excursión).
• Si vas al sendero con tu propio transporte, el precio de entrada al Sendero Pozo Azul es de 10 CUC por persona, derechos de entrada que deben ser pagados con antelación en Ecotur en Baracoa o en las oficinas responsables del sendero, en el motel que queda junto al Faro de Maisí.
• La dificultad mayor es encontrar un vehículo apropiado para recorrer el Sendero Pozo Azul. Un buen jeep puede ser contratado por el día desde Baracoa. El precio puede variar entre 60 y 65 CUC.
• Debido al camino difícil para los vehículos, los 12 km del Sendero Pozo Azul se recorren en una hora y media de ida (y otro tanto al regreso). Es importante salir de Baracoa temprano, considerando que este desplazamiento toma su tiempo.
• Si vas con tu propio transporte, te recomendamos llevar un sándwich y fruta para el camino.
• En Punta de Maisí, junto al Faro y la playa, hay un motel (conjunto de cabañas, con piscina, bar y cafetería) donde puedes tomar algo de beber (sodas, café, etc.) y conseguir algo de comer (galletas o algo por estilo) antes de emprender el Sendero Pozo Azul.
• Por el momento, no se permite a los extranjeros subir al Faro de Maisí, pero nos informan que se está planeando incluirlo como parte integrante de las excursiones autorizadas.
• Pozo Azul es un sitio muy hermoso y muy delicado, que requiere de parte de todos nosotros una consciencia ecológica y mucho cuidado al visitarlo. Te invitamos a leer más acerca del turismo sostenible en la región de Baracoa.